Cineastas contra la corrupción
"Cineminutos por la transparencia" son cinco cortometrajes de un minuto, que se exhibirán por la cadena Cinemex antes de la proyección de las películas
Martes 02 de marzo de 2004Juan Solís | El Universal
Pueden ser 2 millones de dólares o hasta dos pesos, la corrupción no pone tarifas, ni prefiere color alguno: le gusta lo mismo el azul del policía que el verde de un senador. Se expande en los cruceros, en los campos de futbol llanero, en las aulas escolares y en las grandes instituciones. Ahora ha llegado al cine.
A partir de la última semana de marzo, como aperitivo pedagógico, antes de cada película que se exhiba en la cadena Cinemex se proyectará un cortometraje de un minuto de duración en donde se abordará el problema de la corrupción.
"Cineminutos por la transparencia" es el título que agrupa a los cinco cortometrajes producidos por la Secretaría de la Función Pública y el Instituto Mexicano de Cinematografía. Con 500 copias (100 de cada cineminuto) y una distribución nacional, los cortos pretenden concientizar a los espectadores sobre las ventajas que implica evadir la corrupción.
Los cineminutos pertenecen a una campaña gubernamental nacida hace tres años. En primera instancia se produjo un cortometraje de seis minutos titulado Cuando yo sea grande , exhibido por Cinemex durante seis semanas. El año pasado, los primeros cineminutos contra la corrupción se exhibieron en las salas de Cinépolis y Cinemark.
Su objetivo era mostrar los costos de la corrupción y entre ellos se encontraba aquel en que un minusválido en silla de ruedas era atropellado por un microbús, luego de que un policía dejara estacionar en un lugar reservado a discapacitados a una señora que va por su niño.
"Estos cineminutos cuenta Aliza Chelminsky, titular de la Unidad de Vinculación para la Transparencia, son por la transparencia. Narran historias en donde se ve que los ciudadanos tienen la sartén por el mango a la hora de enfrentarse a la corrupción."
Imcine convocó a 15 cineastas. Cada uno presentó un proyecto y al final fueron elegidos cinco. Cuatro de ellos escribieron el guión y dirigieron: Julián Hernández, Salvador Aguirre, Alejandro Lubezki e Ignacio Ortiz. En el caso del corto dirigido por José Luis García Agraz, el guión fue realizado por Fernando Embcke.
El costo total de los cortometrajes fue de 4 millones y medio de pesos. Se rodaron en formato de 35 mm y algunas copias se transfirieron a video digital y VHS. El objetivo es que luego de que se presenten en el cine se exhiban por televisión. Llegarán a todas las universidades del país a través de la ANUIES, así como a todos los municipios. Incluso circularán en empresas como Telmex, que ya aplica los cineminutos en sus estrategias de comunicación interna.
En su producción y distribución no sólo interviene el gobierno, también los creadores, exhibidores y el Consejo de la Comunicación. La fórmula ha resultado exitosa. Chelminsky cuenta que según una encuesta realizada por la Universidad Iberoamericana, el mensaje más conocido respecto al combate de la corrupción a nivel nacional es el de los cineminutos.
"Una vez que el tema ya es conocido, nuestra idea es que a partir del año siguiente las historias abordadas en los cineminutos puedan ser reales, narradas por ciudadanos con nombres y apellidos concluye Chelminsky. Queremos que esta campaña trascienda al gobierno y sea liderada por los ciudadanos."
